Enhorabuena a todos los granotas que habéis vivido cada instante de esta maravillosa temporada porque, habiendo podido huir tras el espantoso descenso del año pasado, decidisteis quedaros al lado del equipo, un equipo que ha vuelto a honrar el azul y grana que muchos llevamos en el corazón y ha dejado constancia de que esta categoría se le quedaba pequeña, tanto a ellos como a la gran afición que es la levantinista. Qué bonito fue el ascenso y qué bien se vive sabiendo que los deberes están más que hechos y que ya solo queda esperar a que la temporada llegue a su fin. Por ello, es hora de acordarse de todo lo bueno que nos ha dejado la misma, que es mucho, y acordarnos de que este proyecto no ha hecho más que comenzar, tomando desde el primer día un rombo idóneo, el que todos deseábamos, el del compromiso y la humildad: Gracias Tito por sentir y materializar lo que el Levante necesitaba. Quitar lo que sobraba y traer lo que hacía falta, además de quedarte con lo fundamental.
72 puntos de 96 posibles; a 14 puntos del segundo clasificado y a 20 de los puestos de promoción a falta de 30 puntos por disputarse; solo 4 partidos perdidos de 32 jugados; invictos en casa con 14 victorias y 2 empates; equipo menos goleado y con el máximo goleador en sus filas, además de ser el segundo equipo que más goles ha marcado en la temporada. ¡QUE PODEMOS ASCENDER EN DOS JORNADAS! Pero por qué no, vamos a quejarnos, total es gratis. Foto: Levante UD Vamos a rajar de Muñiz, ese entrenador que desde el minuto uno devolvió las esperanzas de volver cuanto antes a Primera División después de uno de los años más tristes en mucho tiempo; esa persona a la que todavía no se le ha visto un ápice de euforia aun estando a tal distancia de los competidores más “cercanos”; el técnico que no se achica ante ningún jugador; a ese que desde las más altas esferas del fútbol alaban pero él sigue erre que erre con su partido a partido, e insistiendo que hasta que no sea matemático no he